Otra semana más que empieza, y otra semana más de nervios traducidos en onicofagia preocupante.

Mientras espero ansioso la entrevista del miércoles, sigo recibiendo llamadas para puestos poco interesantes desde INFOJOBS. Negativas y el sueño de trabajar en algo que realmente me apetezca y me motive, me siguen quitando el sueño.

Mientras leo la triste desaparición de Superman (y el pobre que soñaba con volver a caminar) me viene a la cabeza la cantidad de películas suyas que vi de pequeño y cómo fue capaz de crear en muchos la ilusión de ser salvados por un superhéroe...y al final la realidad supera la ficción. Menuda ironía, como diría Alanis...

Mi fin de semana no ha sido espectacular, sólo mencionar lo bien que me lo pasé en los "previos" del sábado con Javi-Médico, Logansan y Laire hablando de sexo, sondas, lavativas, cruising (u otra modalidad de parapente) y otras operaciones, mientras nos tomábamos una sangría y degustábamos, eróticamente, las frutas que la endulzaban.

Al final la noche se torció un poco, y aunque esperaba la llegada de ése (falso) superhéroe, caí de bruces contra el suelo y prometí no volverme a quedar con desconocidos hasta altas horas de la noche (y menos si es en el Long Play).

Intentando hacer pasar el mal trago del sábado, ayer tuve "cura de amigos", primero con mi Gilda en el Templo y luego en las fiestas de Boadilla. Entre el regalo que JM nos trajo de Brasil (pero qué majete!!), lo que me pude reír con una Pilarinchi espídica, Laire haciendo de las suyas mientras se metía un ron tras otro y Josechu con sus aires de Tom-Cruise-en-Cocktail tras la barra del chiringuito, me pude volver a casa saboreando las mieles del éxito, el éxito de haber entrado en calor gracias a las brasas de los que me rodean y me conocen bien.

Parafraseando a Pilarinchi, intentaré seguir disfrutando de este puente que para mí empezó en agosto.

Besos para todos.