Más apologías...

... En el Templo, en el Parque de la Tranquilidad, volviendo a casa a las 6 de la mañana, en tu casa, mientras andamos, jugando al tenis, comiendo en un chino, de botellón, con un café en el Sorrento, comiendo pipas por la Gran Vía, de compras por Fuencarral, de copas por donde sea (en el Long Play, en el Cool, en La Botellita, en el Sethi...), por internet, en el cine, en el baño de cualquier garito, mientras te miras en los reflejos de los escaparates...

No, no es el nuevo guión de María Esteve para la segunda parte de "El otro lado de la cama"... Y tampoco es la continuación de mi serie "Apologías", lo que pasa es que me apetecía rendir un pequeño homenaje al descojone colectivo (dicho mal y pronto).

Ayer fue la despedida de los "Romería Diyeis" en el Tapperware y nos lo pasamos de coña... Junto a Javi-Médico, Ovejitas y Gilda no paramos de bailotear las canciones que Logansan y Nico pinchaban para nuestro deleite...

Y ahí surgió la inspiración para el post de hoy... El descojone era continuo y mientras repasábamos las posturas del Kama-Sutra, imitábamos los bailes de famosos y conocidos, posábamos ante la digital camera de Ovejitas junto a otros personajes anónimos, y nos tomábamos unos cubatas sin límite alguno... (espera que cojo aire)... por los altavoces sonaba Kylie Minogue (tras petición a super-Logan), McNamara y... podría decir muchos más pero creo que me los voy a inventar. Yo sólo me empeñaba en creer que la canción que sonaba era la de los animales (...doing like they do on the Discovery Chanel) o alguna de Depeche Mode.

Y tras un par de bocatas de la esquina de la calle (de dudosa calidad pero a ciertas horas entra lo que sea...) decidimos volvernos pá casa, y es que a veces uno se sorprende a sí mismo diciendo que NO a suculentas tentaciones...

Esperando que el buen rollo y las risas que me echo con mi gente no desaparezcan nunca, me despido hasta la próxima.

HASTA SIEMPRE ROMERÍA!!!!

Besos, besos, y más besos...