Me piro

Tres días solo en casa son para mí un lujo; mis padres han emigrado a tierras del norte a ver a la familia, mi hermano ha emigrado a tierras del noreste a ver a su familia política, y yo me quedo donde estoy por motivos laborales, aunque dada mi situación de "Rodriguez" no me importa nada.

Disfruto más del tiempo que me queda después de currar, no hay horarios, me preparo lo que quiero, invito a los amigos a cenar y me levanto temprano para hacer tareas del hogar. Si me ve mi madre me manda al psicólogo...

Como no se si actualizaré mañana, aprovecho hoy martes para despedirme. Me voy el jueves a Barcelona con Mariote, Javi-Médico y Germán; desde el sábado que estuvimos juntos los de Madrid, no paro de pensar en cosas, de hacer mentalmente mi maleta y de imaginarme cómo será el apartamento, cómo será Sabina (la que nos dará las llaves y la bienvenida a la capital catalana en forma de factura), y en definitiva, cómo será la ciudad, ya que no voy desde que se celebraron las olimpiadas.

Esta semana somos cuatro gatos en la oficina, así que los descansos se multiplican por tres, lógico teniendo en cuenta que más de la mitad de los clientes han dejado sus departamentos a un lado, y los futuros lanzamientos no se producen hasta la mitad de la semana que viene (el márketing funciona peor si el target está de vacaciones). De todas formas mi situación actual (e independiente) me facilita una visión más positiva y no me importa salir a trabajar, son sólo un par de días y lo que viene a la vuelta de la esquina me impide dejar de sonreír.

Feliz semana y hasta la vuelta!!